Para nadie es sorpresa que el tabaquismo sigue siendo la principal causa de cáncer de pulmón en todo el mundo. Este tipo de cáncer es uno de los más comunes y de los más mortales, pero a su vez de los más prevenibles. Por ello, y con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Pulmón, que conmemoramos hoy 17 de noviembre, queremos adentrarnos en la gravedad de fumar tabaco y saber de qué manera se puede identificar este cáncer.

Antes de otra cosa debemos entender qué son los pulmones y cuál es su función. Los pulmones son dos órganos esponjosos que se encuentran en el pecho, con los que se inhala el aire, mismo que contiene el oxígeno que pasa a la sangre. El cáncer de pulmón es una enfermedad en la que las células del pulmón comienzan a crecer de manera descontrolada, generalmente en las células que recubren los conductos de aire.

El cáncer en esta área del cuerpo puede diseminarse a los ganglios linfáticos (que ayudan al cuerpo a reconocer microbios, infecciones y otras sustancias extrañas), e incluso a otros órganos del cuerpo. De la misma forma, el cáncer en otras partes del cuerpo puede llegar a los pulmones, lo que se conoce como metástasis.

El cáncer de pulmón es uno de los más comunes en el mundo, representando el 12.2% de todos los cánceres. De acuerdo con el Instituto Nacional de Cancerología (INCan), en México cada año mueren cerca de ocho mil personas por cáncer de pulmón, lo que lo ubica como el más letal. De hecho, cada año se registran nueve mil nuevos casos de este tumor, 85% de ellos están relacionados con el consumo de tabaco.

Fumar es el factor de riesgo más importante para el cáncer de pulmón, ya que causa 9 de cada 10 casos. Mientras más joven se comience a fumar, más se fume y más cigarros se consuman al día, mayor será el riesgo de padecer esta enfermedad. Es importante mencionar que dejar de fumarreducirá el riesgo de padecer esta afección, pero seguirá siendo mayor que el de las personas que nunca han fumado.

El humo del tabaco expulsa más de siete mil sustancias químicas y decenas de sustancias carcinógenas, pero ¿cómo se produce el cáncer? Bueno, dichas sustancias alteran el ADN de las células, que controla el crecimiento y funcionamiento de las mismas. Cuando se daña el ADN, las células pueden comenzar a crecer sin control y formar un tumor canceroso. De hecho, el tabaquismo puede causar cáncer en casi cualquier parte del cuerpo.

En Pacientes Como Yo ya te hemos contado los beneficios de dejar de fumar, pero debemos destacar que si una persona ha fumado toda la vida y deja de hacerlo, dentro de 15 años su riesgo de padecer cáncer de pulmón se reducirá a la mitad.

Por lo general, el cáncer de pulmón no produce síntomas en etapas iniciales, sino hasta que ha avanzado. Pero, ¿cómo identificarlo cuando ya está en esta etapa? Estos son los síntomas más comunes: dolor o molestia en el pecho, tos que no desaparece o que empeora con el tiempo, dificultad para respirar, sangre en el esputo, ronquera, pérdida de apetito, pérdida de peso sin causa aparente, fatiga, problemas para tragar e hinchazón en la cara y/o venas del cuello.

Entonces, si tú o una persona que conoces ha fumado durante mucho tiempo, puede que te estés preguntando ¿se puede detectar el cáncer de pulmón en etapas iniciales? La única prueba recomendada para este tumor es la tomografía computarizada de baja dosis, una prueba que utiliza rayos X para escanear el cuerpo usando dosis bajas de radiación para generar imágenes detalladas de los pulmones.

¿Y quién debe hacerse esta prueba y cada cuanto? Ésta se recomienda anualmente para personas que fuman en la actualidad o dejaron de hacerlo en los últimos 15 años, y en ambos casos, que tengan entre 55 y 80 años. Si tienes alguno de los síntomas del cáncer de pulmón, acude a una revisión médica para que, si el doctor lo considera necesario, te recomiende una prueba de detección.

Recuerda que la prevención es clave para mantener unos pulmones sanos. Evita el cigarro, acude regularmente al médico y no olvides visitar Pacientes Como Yo,  donde encontrarás lo que necesitas conocer acerca del cáncer de pulmón y muchos otros padecimientos.

Es una masa anormal de tejido que se forma debido a células que se multiplican sin control o no se mueren cuando deberían. Los tumores pueden ser benignos y crecer mucho pero no invadir otros tejidos ni órganos cercanos; y malignos, es decir cancerosos e invadir otras partes del cuerpo viajando a través de la sangre o el sistema linfático. El tratamiento para los tumores depende de si son benignos o malignos y de qué tan avanzado esté, pero solo un médico puede recomendar el tratamiento apropiado para cada caso en particular.
Comúnmente conocido como flema, es un tipo de mucosidad que se produce en los pulmones. La consistencia del esputo ayuda a atrapar el material extraño como hongos o bacterias para expulsarlos por la boca al toser. El esputo puede ser de distintos colores y cada uno apunta a un padecimiento diferente: Transparente, blanco o gris: no necesariamente indica una enfermedad, pero en abundancia puede significar una enfermedad pulmonar. Amarillo oscuro o verde: puede indicar una infección bacteriana o incluso fibrosis quística, una enfermedad hereditaria en la que se acumula mucosidad en los pulmones u otros órganos. Café: ocurre principalmente en personas que fuman y en aquellos expuestos al polvo del carbón. Rosa: puede indicar un edema pulmonar, una acumulación excesiva de líquido en los pulmones. Rojo: puede ser un signo de cáncer de pulmón o de una embolia pulmonar. Toser esputo rojo o con sangre es una emergencia médica que requiere atención inmediata.
Ir a WhatsApp
Agenda una Cita
Pacientes Como Yo
¡Hola! Gracias por contactarnos. ¿Te ayudamos a agendar una cita?