Para muchas personas hablar de la impotencia sexual es hablar de una falta de masculinidad, pero en realidad no tiene nada qué ver. La masculinidad es un constructo social, mientras que la impotencia es una condición física. De hecho, en muchos casos la impotencia masculina es un síntoma de alguna enfermedad, entre las más comunes están: tener el colesterol alto, enfermedades cardíacas, vasos sanguíneos obstruidos, presión arterial alta, diabetes, , Parkinson, entre otras.
Además de estas causas físicas, la impotencia sexual puede ser provocada por afecciones de salud mental como estrés, ansiedad o depresión, por lo que es importante saber que al salir de un “bache” mental, la disfunción puede revertirse. Lo mismo ocurre con las enfermedades físicas, al tratarlas y mejorar la salud, la impotencia puede desaparecer.
En este sentido, también debemos mencionar que tener problemas de erección de vez en cuando no es un motivo para preocuparse, pero si este se vuelve un tema recurrente puede provocar estrés y así un círculo vicioso. Si la impotencia comienza a causar problemas de pareja, debe considerarse como uno de los motivos para ir al urólogo.
Acudir con un especialista ayudará para encontrar una solución a la disfunción eréctil, ya que existen muchas y cada una depende específicamente de la persona y sus condiciones físicas y mentales. Sin embargo, queremos hablarte de las pastillas para la erección masculina, una de las soluciones más comunes pero que no aplican para todo mundo.
Los medicamentos orales para la disfunción suelen ser la primera línea de tratamiento para la mayoría de los hombres, y por lo regular son efectivos y no tienen ningún efecto secundario. La función de estos medicamentos es relajar los músculos del pene, lo que aumenta el flujo sanguíneo causando así una erección. Cada medicamento para disfunción tiene una composición ligeramente diferente, lo que afecta la manera en la que funciona cada uno, como la rapidez o los efectos secundarios.
Aunque los efectos secundarios de las pastillas para la erección suelen ser leves, los más comunes incluyen: enrojecimiento de la piel, dolor de cabeza, malestar estomacal, sensibilidad a la luz o visión borrosa, congestión nasal, dolor de espalda y sensación de mareo. Rara vez aparecen efectos más graves, estos pueden ser: pérdida repentina de la visión o la audición o priapismo, una afección dolorosa en la que la erección no desaparece por sí sola.
Y, ¿en qué casos no se recomiendan las pastillas para la erección? No se recomiendan en personas con determinadas afección debido a que pueden ser peligrosas. Estas enfermedades son: angina de pecho, hipertensión arterial muy alta o presión arterial muy baja, enfermedad renal que debe tratarse con diálisis, problemas recientes del corazón o de los vasos sanguíneos, incluyendo infarto, accidente cerebrovascular o algún trastorno del ritmo cardíaco en los últimos seis meses. Estos medicamentos no deben tomarse más de una vez cada 24 horas ya que una sobredosis puede provocar un infarto.
Como mencionamos anteriormente, las pastillas para la disfunción no son una solución para todos. Para casos más complejos existen otras alternativas de tratamientos como las prótesis penianas que son dispositivos que se implantan en el pene para conseguir una erección. Existen dos tipos: inflables o maleables, las primeras funcionan con una bomba que transfiere una solución para “inflar” el pene, mientras que las segundas siempre mantienen la erección y el paciente solo ajusta el pene a la posición deseada.
No tengas pena de acudir al urólogo, recuerda que este especialista no solo ayuda en los problemas de erección, también en la incontinencia urinaria, eyaculación precoz o el agrandamiento de próstata. En Pacientes Como Yo contamos con un amplio directorio de urólogos certificados, así que si deseas acercarte a uno, puedes escribirnos y con gusto te contactaremos con el que se adapte mejor a tu ubicación.
Referencias:
Gobierno de México (2016) https://www.gob.mx/conavim/articulos/que-es-la-masculinidad?idiom=es
MayoClinic (2023) https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/erectile-dysfunction/in-depth/erectile-dysfunction/art-20047821